Las Columnas de Opinión:
Las FAN
Por Kelder Toti.
Por Kelder Toti.
La Fuerza Armada Nacional
Bolivariana (FANB) de la República Bolivariana de Venezuela está integrada
por alrededor de 250.000 a 350.000 combatientes activos, ya que existe una
nómina fantasma, que le permite a los oficiales del Ejército y de la Milicia
enriquecerse, se calcula que la Milicia Nacional está formada por 80.000
hombres, en capacidad de prestar servicios como reservistas. No obstante, esta
cifra de efectivos activos en caja, se aproxima a 155.000 hombres y mujeres de
primera línea (incluyendo los más aptos para ser llamados primero,
entendiéndose por estos, aquellos hombres y mujeres en edades de 17 - 39
años), distribuidos en cinco (5) componentes de Tierra, Mar y Aire.
Esto según lo prescribe el Artículo 328 de la Constitución Nacional y el Artículo n° 29 de la Ley Orgánica de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana. Dichos componentes se complementan con la Milicia Nacional Bolivariana, la cual es un cuerpo especial de reservistas organizado por el Estado Venezolano, integrado por la Reserva Militar y la Milicia Territorial destinada a complementar a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana en la Defensa Integral de la Nación y garantizar su independencia y soberanía.
Por tanto, los mencionados componentes
que conforman la Fuerza Armada Nacional Bolivariana son, a
saber, los siguientes:
Los principales roles cumplidos por la
Fuerza Armada son la defensa de la soberanía del territorio nacional, espacio
aéreo, insular, el combate al tráfico de drogas, búsqueda y rescate y protección
civil en los casos de desastre. Todos los ciudadanos venezolanos varones tienen
el deber legal de inscribirse en el registro militar al cumplir los 18 años de
edad, que es la mayoría de edad en Venezuela, aunque la prestación como tal del
servicio actualmente es voluntaria.
A parte del funcionamiento esencial de la seguridad y defensa de la Nación con el funcionamiento de los cuatro (4) componentes y la Milicia Nacional, la Ley Orgánica de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana señala también el funcionamiento de la Guardia de Honor Presidencial de Venezuela en su artículo No. 8, así como su condición de cuerpo encargado de la seguridad, custodia y protección del Presidente(a) de la República así como sus familiares directos.
A parte del funcionamiento esencial de la seguridad y defensa de la Nación con el funcionamiento de los cuatro (4) componentes y la Milicia Nacional, la Ley Orgánica de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana señala también el funcionamiento de la Guardia de Honor Presidencial de Venezuela en su artículo No. 8, así como su condición de cuerpo encargado de la seguridad, custodia y protección del Presidente(a) de la República así como sus familiares directos.
La Fuerza Armada Nacional de Venezuela
está compuesta por 350,000 efectivos en total (esto sin contabilizar las
reservas). Este contingente es de 350.000 hombres y mujeres estaría distribuido
de la siguiente manera: el Ejército Nacional (210.000 efectivos; 60% del
total); la Guardia Nacional (52.500; 15% del total); la Armada Nacional
(35,000; 10% del total); y la Aviación Militar (52.500; 15% del total) Milicia
Nacional o Reserva (con alrededor de 787.500 efectivos en buen estado para la
guerra, aunque es una exageración sin nínguna base real) ya que es cuerpo
entrenado para la represión interna y no para la guerra convencional o asimétrica,
lo que la pone a merced de sus enemigos naturales; se recuerda que los
porcentajes se calculan en base a la cantidad total por componente y las cifras
son aproximadas. Venezuela ocupa el tercer lugar en la relación de efectivos
militares por cada 10 mil habitantes para Sur América.
Expertos estiman que estas cifras son
un aproximado y que no son exactas. Algunos de ellos, señalan la cantidad de
efectivos entre los 700.000 y 1.000.000 de hombres y mujeres (entre pie de
fuerza y milicia nacional). Sin embargo, de manera oficial no se ha publicado
información alguna sobre el pie de fuerza de la FANB.
Ejército
Nacional
El Ejército venezolano, está conformado
hoy por unos 210.000 efectivos (incluidos los conscriptos, que carecen de
entrenamiento adecuado, ya que los únicos que tienen conocimiento sobre el uso
de las armas son los oficiales y los sargentos), su función principal es la de
planificar, ejecutar y controlar las operaciones militares terrestres en
coordinación con los restantes componentes de la Fuerza Armada Nacional, cosa
que no ocurre al carecer las FAN de experiencia de combate y el uso de las
armas combinadas, en procura de la Defensa integral de la Nación.
Está organizada actualmente por seis
Divisiones operativas, aunque pudiera elevarse a 20 Divisiones con 14
Divisiones de Fusileros, si se contara con el equipo y entrenamiento
necesario. Esta cuenta con un Comando de la Aviación del Ejército, un Cuerpo de
Ingenieros, y los comandos de Logística y de las diferentes Escuelas, respectivamente.
El Ejército Nacional es escaso en armamento moderno y poco disciplinado,
con pocas unidades acorazadas, de infantería, de ingenieros y de artillería con
resolución o entrenamiento adecuado, con una limitada capacidad de proyección,
y recursos, que le permiten desarrollar operaciones de tipo aeroterrestre de
manera local para su dimensión, ya que carece de capacidad estratégica, frente
a sus principales enemigos (USA, Cuba, Brasil y Colombia). Ya que su
operatividad es para la represión interna no para una guerra convencional.
El origen más antiguo del Ejército
organizado y profesionalizado que conocemos hoy, se remonta a las Tropas
Españolas acantonadas en la otrora Capitanía de Venezuela, de finales del siglo
XVIII. Hasta 1786 política y militarmente, la Provincia de Venezuela dependió
de Santo Domingo (hoy República Dominicana) o de Santa Fe (hoy Colombia), pero
a partir de ese año, el 13 de septiembre se crea una Audiencia, por lo que las
tropas españolas acantonas en dicha localidad, pasan a un mando local.
Pero también las demás provincias del
país, pasaron al mando del Capitán General de Venezuela. Se crean de esta
manera una serie de unidades autónomas. Anteriormente, y desde 1732 que se crea
la Comandancia Militar, se habían creado una serie de batallones, y habían unos
piquetes de Infantería pertenecientes a los regimientos afincados en
España. Los primeros piquetes de Caballería se forman en 1751, cuando arriban
cuatro de España. Dos años después (1753) se crean las primeras compañías de Artillería,
y comienzan a ingresar a las filas los criollos blancos y pardos.
Ese mismo año se crea el Batallón de Caracas. Hasta la creación de este batallón, la defensa colonial se basaba en pequeñas compañías de milicianos. Progresivamente, la política racista y de supremacía blanca de la Corona Española, va cediendo y permite el ingreso a las milicias, de morenos y negros. Fue bajo este crisol de unidades que se formaron la mayoría de los cuadros de oficiales que luego desarrollarían y comandarían las Tropas Patriotas en la Guerra de Emancipación, incluidos el generalísimo Francisco de Miranda, el Libertador Simón Bolívar, el padre de Bolívar (que llegó a ser coronel de las Milicias de Aragua), los generales en jefe Santiago Mariño, Rafael Urdaneta, entre otros muchos otros.
Ya en los primeros años del siglo XIX,
muchos de estos oficiales venezolanos, comenzaron a arribar al país luego de
participar en campañas militares en el exterior, en la Guerra de la
Independencia estadounidense, en la Revolución Francesa; o bien luego de
culminar sus estudios en Europa. Con ellos arribaron también una serie de
mercenarios de muy diversas nacionalidades: ingleses, escoceses, irlandeses,
franceses, alemanes, brasileños, polacos, rusos, entre otros, que elevaron la capacidad
de combate de los patriotas.
Se puede decir que las primeras dos décadas del siglo XIX, el naciente Ejército Libertador, se van en medios de la formación más intelectual que militar de sus cuadros, en las diversas intentonas de desatar la guerra revolucionaria, y en tratar de estructurar un ejército moderno, en medio de esa tarea, es sorprendido el generalísimo Francisco de Miranda, y aparece la figura militar de José Antonio Páez y Antonio José de Sucre, quienes ostentan la formación teórica Ejército Libertador, y llama a la acción inmediata.
Páez sorprende a sus colegas militares contemporáneos, cuando rechaza parcialmente, los postulados militares napoleónicos, en favor de la caballería de lanceros y adopta conductas y costumbres militares más bien venezolanas, que se deberían retomar e incluso acepta la ayuda de la Corona Británica, coordinada por Simón Bolívar. Y no se equivocó: el siglo XIX, a la larga, es dominado por las influencias militares británicas y prusianas. Ya en la batalla, Páez comienza a desarrollar sus propias tácticas, estrategias y costumbres militares, cuyo legado nos llega hasta el día de hoy, que ha sido desechado por el bolivarianismo.
Se puede decir que las primeras dos décadas del siglo XIX, el naciente Ejército Libertador, se van en medios de la formación más intelectual que militar de sus cuadros, en las diversas intentonas de desatar la guerra revolucionaria, y en tratar de estructurar un ejército moderno, en medio de esa tarea, es sorprendido el generalísimo Francisco de Miranda, y aparece la figura militar de José Antonio Páez y Antonio José de Sucre, quienes ostentan la formación teórica Ejército Libertador, y llama a la acción inmediata.
Páez sorprende a sus colegas militares contemporáneos, cuando rechaza parcialmente, los postulados militares napoleónicos, en favor de la caballería de lanceros y adopta conductas y costumbres militares más bien venezolanas, que se deberían retomar e incluso acepta la ayuda de la Corona Británica, coordinada por Simón Bolívar. Y no se equivocó: el siglo XIX, a la larga, es dominado por las influencias militares británicas y prusianas. Ya en la batalla, Páez comienza a desarrollar sus propias tácticas, estrategias y costumbres militares, cuyo legado nos llega hasta el día de hoy, que ha sido desechado por el bolivarianismo.
Al contrario a lo que se ha escrito, la
segunda mitad del siglo XIX, el Ejército regular jamás se desactivó, y si bien
su desarrollo fue obstinadamente lento, ya que solo alcanzó a forma 6
batallones en línea de combate, no se detuvo nunca, prueba de ello es que se
mantuvo durante ese tiempo una escuela de oficiales (la Academia Militar de
Matemáticas, que por decir algo se adelantó en décadas a la política de
unificación de armas y servicios de la Academia Militar española, de hecho esta
es posterior a la venezolana), una Tropa permanente, se crean nuevas armas y
servicios, incluido el Cuerpo de Zapadores.
Esta etapa del Ejército venezolano, esta signada por luchas intestinas y un dominio importante de las milicias locales, sin formación profesional. La poca ayuda externa en materia militar en esta etapa, se limitó a los ingleses. Las figuras militares (políticamente hubo otras figuras) del Ejército más importantes de esta etapa son el Mariscal Juan Crisóstomo Falcón, el general en jefe Cipriano Castro, el General de Brigada Ezequiel Zamora y Manuel Ezequiel Bruzual.
Ya en la primera mitad del siglo XX,
aparece la figura política del general en jefe Juan Vicente Gómez, el cual
inicialmente basado en los planes del general en jefe Cipriano Castro, comienza
una modernización profunda en el Ejército, pero no crea un Ejército nuevo como
algunos historiadores señalan, ya que éste sería formado por Castro. Esta
modernización contó con la ayuda de instructores y consejeros chilenos,
franceses, italianos y alemanes. Curiosamente, la tardía influencia prusiana,
no le llega al Ejército venezolano de la mano de los alemanes, sino de la mano
de los chilenos. En esta etapa las figuras militares y políticas más relevantes
(aparte del propio general Gómez), fueron el general en jefe Eleazar López
Contreras y el general de división Isaías Medina Angarita.
La segunda mitad del siglo XX, nace
igual de turbulenta para el Ejército, pero este se proyecta al futuro como una
fuerza moderna, si bien aún no cohesionada bajo un mando flexible, equilibrado
y capaz, desde un punto de vista militar. Ya bajo el gobierno del General de
División Marcos Pérez Jiménez, aparece la influencia cultural, política y
militar más preponderante de toda la historia del Ejército: la influencia
estadounidense, que será un grave error.
Aunque intenta diversificar los proveedores para no hacerlo dependiente de los suministros americanos. De manera celosa el Ejército Nacional, a los largo de las posteriores décadas, mantuvo en su seno, una precaria pero existente influencia francesa, a modo de equilibrio ante la avasallante influencia estadounidense, que de poco sirvió como se demostraría posteriormente con el veto de venta de armas de los norteamericanos.
Aunque intenta diversificar los proveedores para no hacerlo dependiente de los suministros americanos. De manera celosa el Ejército Nacional, a los largo de las posteriores décadas, mantuvo en su seno, una precaria pero existente influencia francesa, a modo de equilibrio ante la avasallante influencia estadounidense, que de poco sirvió como se demostraría posteriormente con el veto de venta de armas de los norteamericanos.
Entre los años 1945 y 1952, se produce un importante programa de equipamiento militar casi monopolizado por las compras a los Estados Unidos (aunque otras fuerzas adquirieron material de otras procedencias). Y nuevamente en los primeros años de la década de los años 70, aunque de una manera más equilibrada por sus orígenes, se desechó la posibilidad de fabricar piezas y partes de repuesto manera local o desarrollar una industria de armento nacional de envergadura.
El nuevo Ejército del siglo XXI, nace
nuevamente bajo un escenario turbulento en lo interno y externo de la nación,
por las sucesivas crisis del modelo político chavista. Pero en relativamente
poco tiempo, ha sufrido cambios importantes, y ha retomado sus viejos
estándares revolucionarios, socialistas y anti-imperialistas como doctrina,
aunque ésten vacío de contenido conceptual y doctrinal en lo militar.
En cuanto al equipamiento del Ejército
Bolivariano, influenciados por el "Veto a las compras militares"
impuesto por el Gobierno de los Estados Unidos de América durante el gobierno
de George W. Bush, por la retórica incendiaria de Hugo Chávez, dejó
inutilizado por falta de repuesto el 40% de los sistemas, que se deben
recuperar al llegar a un acuerdo con el Congreso Norteamericano; se producen
cambios significativos en relación a los proveedores tradicionales de
armamento, donde la principal fuente de material bélico era Estados Unidos, y
pasa a ser reemplazada por Rusia y China, de menor calidad que el armamento
americano.
El proceso de modernización emprendido en el ejército incluye a su vez el mejoramiento de la capacidad de movilización de tropas y ataque, mediante la adquisición de helicópteros de transporte y artillados de fabricación rusa, despreciando la posibilidad de fabricarlos localmente, bajo licencia.
Los fusiles belgas FN FAL de 1952 han
sido reemplazados por 100.000 fusiles rusos Kalashnikov AK-103, 50.000 fusiles AK
74 bieloruso, restándole poder de fuego a la infantería en combates urbanos, lo
mejor hubiera sido la modernización del FAL. A la par de la adquisición
de estos fusiles, se negoció la licencia de la producción en Venezuela de este
modelo.
En agosto de 2007, el ejecutivo anunció
la compra de 5.000 rifles Dragunov para francotiradores, careciendo de una
escuela de calidad para el desarrollo del francotirador y su asistente, lo
mejor es contratar mercenarios rusos o ucranianos que mejoren la habilidad
táctica de los francotiradores.
Es de resaltar el desarrollo del
vehículo táctico de fabricación local denominado· Tiuna, que sería el
transporte ligero estándar de tropa, que sustituyó al costoso Humvee. Contando
con hasta con 9 modelos (entre ellas antitanque, antiaéreo, policía militar,
etc). Entre otros avances bélicos el ejercito venezolano presentó el fusil de
precisión "Catatumbo" que varía de calibres como .50, 7.62, etc. Sin
los sirvientes entrenados adecuadamente para su uso.
Para complementar los batallones
blindados del Ejército se inició en mayo 2011, cuando se recibieron los
primeros 35 carros de combate T-72B1, 16 BMP-3, 32 BTR-80A; 24 lanzacohetes
móviles BM-21 Grad y el obús
autopropulsado 2S19 MSTA-S, hoy en
día están en servicio; 192 tanques T-72B1, 150 BTR-80A, 50 BM-21
Grad y mas de 50 2S19 Msta-S en el Ejército. Siendo insuficiente el armamento
pesado para enfrentar una invasión de los USA o repeler un ataque preventivo de
Colombia. Ya que para repeler una invasión, necesitaría poseer 40 Divisiones
Profesionales, 60 Divisiones de Segunda Línea y 20 Divisiones de Reserva.
El Ejército Nacional carece de las
táctica y de la Estrategia, que le permita hacerle frente una invasión de sus
enemigos naturales, que deberá ser suplida con expertos extranjeros que
instruyan a la oficialidad en guerra convencional, a los sargentos en dirección
de pelotón y entrenen en armas, formación de espíritu de cuerpo y tácticas de
combate urbano y rural a los soldados profesionales; acentuada esa deficiencia
al carecer de un Estado Mayor de Tierra que planifique el crecimiento armónico
del Ejército, tomando en cuenta las limitaciones del país, evitando que éste se
convierta en un lastre para el país cuando caíga los precios del petróleo.
Ya en el siglo XXI, el Ejército
venezolano ha experimentado un crecimiento sin precedentes, incorporando
material bélico procedente mayormente de Rusia o China,
despreciando el armamento de Bielorusia o Irán de última generación, pero
escaso en número para defender al país de sus enemigos (Colombia, USA,
Cuba y Brasil), en casi todos los segmentos de su arsenal predomina el
armamento Ligero, que no permiten una modernización casi total de la fuerza, ya
que su nivel técnico es muy bajo. En las últimas tres décadas, ha tenido que
enfrentar el desbordamiento hacia Venezuela del conflicto
interno colombiano, incentivado por la invasión pacífica de aparceros
colombianos.
Armada Nacional
La Armada venezolana, es concebida como
una fuerza naval moderna, mediana, y con capacidad oceánica. La misión
fundamental de la Armada es la de ejecutar, dirigir y controlar las operaciones
navales, aeronavales, anfibias, fluviales, guardacostas y de apoyo a las actividades
acuáticas a fin de garantizar el cumplimiento de los planes de empleo.
El personal estimado es de 35.000,
hombres y mujeres, incluyendo a 8.000 Infantes de Marina y unos 500 efectivos
de la Aviación Naval. La cadena de mando de la Armada venezolana es la
siguiente: Comandante General, Inspector General y Jefe del Estado Mayor
General. Existen cinco grandes comandos: Comando Naval de Logística, Comando
Naval de Personal, Comando Naval de Educación, y el Comando Naval de
Operaciones, que a su vez está integrado por: el Comando de la Escuadra, el
Comando Fluvial, el Comando de Aviación Naval, el Comando de Guardacostas, y la
División de Infantería de Marina. Operacionalmente el país está dividido en dos
zonas navales; Zona Naval de Occidente (CG: Punto Fijo) y Zona Naval de Oriente
(CG: Carúpano) que de momento, cubre también la Fachada Atlántica. Esta
proyectada la activación de las zonas navales del Centro (CG: Puerto Cabello),
del Atlántico (CG: Güiria) y del Sur (CG: Caicara del Orinoco).
El origen más remoto de la Armada
venezolana lo podemos situar en la Expedición a La Vela de Coro del
generalísimo Francisco de Miranda, en cuya primera expedición contó con el
apoyo tres buques: el bergantín “Leander”, y las goletas “Bacchus” y “Bee”. En
ésta expedición Miranda, enarboló el pabellón tricolor venezolano, zarpando del
Puerto de Jacmel, en la costa sur de Haití, el 28 de marzo de 1806, hacia tierra
venezolana en persecución de la libertad para su patria. Miranda intentó dos
veces en 1806 invadir el territorio venezolano, con una expedición
armada proveniente de Haití. Sus incursiones terminaron en fracasos por
muy diversos motivos, ya que carecía de capacidad militar para ejecutarlas. En
1811 se crea la primera Escuela Naval de Venezuela en el Puerto de La Guaira,
con el nombre de Escuela Náutica, bajo la dirección del Alférez de Fragata
Vicente Parrado, para la formación de guardiamarinas. Entre 1811 y 1813, nace
propiamente, la Escuadra Nacional. Ese mismo año de 1813, se inician las
primeras hostilidades que involucran a la Escuadra Nacional. A partir de allí,
y de manera intermitente se activan y desactivan escuadras, hasta que el
Libertador Simón Bolívar, en marzo de 1816, organiza en Los Cayos de San Luís,
en Haití, una nueva Expedición Libertadora. Ya nunca más volvería a desaparecer
esta.
El 24 de julio de 1823, se llevaría a
cabo la Batalla Naval del Lago de Maracaibo, donde la Flota y la Infantería, de
la Armada Libertadora, demostraron su destreza y valor. Dicha batalla consolidó
la independencia lograda dos años antes en el Campo de Carabobo. La segunda
mitad del siglo XIX, la Escuadra Nacional se vio muy reducida en cantidad de
buques, pero en ese periodo llegaron los primeros buques a vapor. Dentro del
período comprendido entre los años 1845 y 1890, en los distintos alzamientos
que alteraban la conducción política del país, los buques de Armada venezolana,
se repartieron indistintamente entre el gobierno y sus oponentes,
incrementándose el número de ellos, para luego ser desincorporados una vez
concluidas las distintas revoluciones, por falta de presupuesto y
mantenimiento.
En la primera mitad del siglo XX,
inicia su andadura con un bloqueo naval impuesto por las potencias europeas,
bloqueo que solo cesa cuando interviene Estados Unidos para hacer valer la
Doctrina Monroe (“América para los americanos”), mediante presencia naval
frente a nuestras costas. Sin embargo, ya en la década de los años 20,
restituidas las relaciones internacionales con las potencias europeas, se
vuelve a recurrir a la ayuda de estos países, concretamente a Italia e
Inglaterra, que son los que monopolizan, hasta mediados de la década de los
años 40, todas las adquisiciones y ayudas técnicas y doctrinarias en la Armada
venezolana.
En este periodo, ingresan los primeros buques blindados y artillados para la guerra desde su diseño (pues los buques de las últimas décadas del siglo XIX, eran buques mercantes modificados para la guerra). En 1909 comienza la producción nacional de diques y astilleros nacionales, con la colocación de la quilla de un guardacostas de vapor, que recibió el nombre de “29 de Enero”, el primero de una serie de tres (los otros serían: el “Cristóbal Colón” y el “Ciudad Caracas”).
En este periodo, ingresan los primeros buques blindados y artillados para la guerra desde su diseño (pues los buques de las últimas décadas del siglo XIX, eran buques mercantes modificados para la guerra). En 1909 comienza la producción nacional de diques y astilleros nacionales, con la colocación de la quilla de un guardacostas de vapor, que recibió el nombre de “29 de Enero”, el primero de una serie de tres (los otros serían: el “Cristóbal Colón” y el “Ciudad Caracas”).
La segunda mitad del siglo XX,
comienzan con un incremento considerable en el poder naval, con la
incorporación a partir de 1945, de siete corbetas ex – canadienses y un buque
de desembarco ex – estadounidense, también se inicia la construcción de un mini
submarino de desarrollo nacional que nunca se concluye; y luego a principios de
los años 50, se adquieren tres destructores pesados británicos y seis
destructores ligeros italianos, todos de nueva fabricación, es cuando la Armada
alcanza su mayor poder de fuego de su historia.
En los años 60, se produce un notorio estancamiento en el desarrollo de la Armada venezolana, motivada por la guerra de guerrillas de los marxistas; y solo se reciben algunos viejos buques de segunda mano estadounidense, pero entre ellos se recibe el primer submarino de la Armada, el “Carite”. Ya en los 70 es que la Armada venezolana da un paso importante en su modernización bajo el plan denominado: “Reafirmación Marítima”, el cual estipulaba la creación del Escuadrón Aeronaval, la adquisición de unidades nuevas (submarinos, fragatas, veleros, etc.), para reforzar la ya estructurada Escuadra Nacional. En los años 80 se renueva y refuerza el sector de los buques anfibios, con la adquisición en Surcorea de cuatro buques tipo LST, y en Estados Unidos dos buques tipo LCU. En los años 90 se produce un nuevo estancamiento, y modernización y adquisiciones que se tenían que realizar en la época, motivado al clima conflictivo que se vivía en el país, se deja para después.
Ya en el siglo XXI, y pese a las deudas
operativas acumuladas, la Armada venezolana ha ido superando obstáculo tras
obstáculo, hasta llegar a ser una de Armadas latinoamericanas con mayor
proyección a futuro. Una alianza estratégica entre la Unidad Coordinadora
de los Servicios de Carenado de la Armada (Ucocar) y la empresa holandesa
Damen, permitió la construcción del primer patrullero costero realizado en el
país con mano de obra totalmente venezolana.
Éste es el ARBV Págalo PG-51, el cual se bautizó y botó al agua por primera vez en un acto realizado en las instalaciones de Ucocar, ubicadas en la Base Naval Agustín Armario de Puerto Cabello, estado Carabobo, el jueves 14 de agosto de 2008.La construcción de esta embarcación comenzó el 28 de junio de 2007, con el objetivo de cubrir la necesidad de la Armada Bolivariana en la adquisición de unidades que contribuyan a aumentar la capacidad de resguardo y control marítimo en nuestras costas.
Éste es el ARBV Págalo PG-51, el cual se bautizó y botó al agua por primera vez en un acto realizado en las instalaciones de Ucocar, ubicadas en la Base Naval Agustín Armario de Puerto Cabello, estado Carabobo, el jueves 14 de agosto de 2008.La construcción de esta embarcación comenzó el 28 de junio de 2007, con el objetivo de cubrir la necesidad de la Armada Bolivariana en la adquisición de unidades que contribuyan a aumentar la capacidad de resguardo y control marítimo en nuestras costas.
El Págalo PG-51 es un buque de casco en
V capaz de alcanzar hasta 27 nudos de velocidad con el empleo de sus motores de
2.800 caballos de potencia. La embarcación está concebida para albergar 11
tripulantes, pudiendo inclusive alojar personal masculino y femenino en
camarotes independientes. Entre algunas de sus especificaciones técnicas se
destacan sus motores diésel propulsores marca Caterpillar, tanques de agua con
capacidad total de 4.200 L, planta desalinizadora de 2.000 L de agua por día,
planta de tratamiento de aguas negras, radar de navegación de alta tecnología,
ecosonda, GPS, tanque de combustible de 12.000 L (Diésel), entre otras.
La historia de la Infantería de Marina
venezolana se inicia con el primer desembarco con características de asalto,
que se haya realizado en Latinoamérica, descartando a los asaltos piratas y
británicos: el desembarco del generalísimo Francisco de Miranda en la Vela de
Coro el día 4 de agosto de 1806, y la tropa de este,
la primera Tropa de Marina que existió en la aún por nacer, república
independiente de Venezuela. Si bien durante el transcurso de la Guerra de
Emancipación se suceden otros desembarcos en combate, la Infantería de Marina
no existe como tal, sino hasta que en 1822 el Vicepresidente de Colombia,
general Francisco de Paula Santander, por decreto, crea el Primer Batallón de
Infantería de Marina, dependiendo en pie y fuerza, de los batallones del
Ejército.
En 1823, esta recién creada Infantería de Marina demostró su necesaria existencia como fuerza en las incursiones de forzamiento de la Barra de Maracaibo, Punta de Palma, La Hoyada, El Moján y el asalto a la Ciudad de Maracaibo (Estado Zulia) el 16 de junio de 1823. Pero la Infantería de Marina moderna se crea en el año de 1938, cuando por Resolución No. 28, del 1 de julio, la Infantería de Marina resurge en la Armada venezolana, con el nombre de “Compañía de Defensa de Costas”. El 11 de diciembre de 1945, se decreta la creación del Batallón de Infantería de Marina. El 26 de febrero de 1958 se crea el Comando de Infantería de Marina. Y recién, en el año 2001, el Comando es levado a División de Infantería de Marina. Actualmente este componente está atravesando un intenso e interesante proceso de modernización y una nueva Armada se avizora en el horizonte. Su Comandante General es el Almirante Diego Antonio Guerra Barreto.
La Armada cuenta con las fragatas, submarina y patrullera para realizar su labor de protección de sus aguas territoriales. Adicionalmente a éstos, la Armada cuenta con el buque escuelaSimón Bolívar, cuatro buques de desembarco de tanques, el buque de aprovisionamiento de combate Ciudad Bolívar y el buque oceanográfico Punta Brava.
El equipo pesado actual de la Armada de Venezuela llega al país al final de la década de 1970 y principios de 1980. Las fragatas misilísticas con que cuenta son de fabricación italiana de la Clase Lupo mientras que los submarinos son de fabricación alemana y corresponden al Tipo U-209/1300.
Hasta los momentos, los proveedores habituales de la Armada venezolana a nivel de equipos diversos, sistemas y capacitación técnica, han sido: Estados Unidos de América, Francia, Italia,España, Alemania, el Reino Unido, Holanda, Israel, Argentina,Corea del Sur y Canadá. Pero recientemente, y producto en parte del embargo militar que unilateralmente decretó el gobierno de Estados Unidos de América, la Armada venezolana ha vuelto su mirada hacia Rusia, Irán, China, Vietnam, y Cuba, para determinados trabajos de reparación, construcción y capacitación de personal. Así, se tiene previsto recibir por parte de Cuba de cuatro transporte ligeros de carga y de Rusia ocho helicópteros de apoyo táctico, así como existen negociaciones en firme para la adquisición de hasta nueve submarinos de tipo oceánico.
La industria naval venezolana, también se ha visto beneficiada de este embargo militar. UCOCAR ha estado desarrollando diversos tipos de lanchas ligeras; DIANCA ha incrementado sus trabajos de reparación y ha construido para la Armada venezolana un moderno remolcador y un patrullero costero con ayuda técnica holandesa; Cuba y Venezuela han creado en Maracaibo unos astilleros nuevos, llamados ASTIMARCA. Quizás el proyecto más ambicioso con que cuenta actualmente la industria naval venezolana, es el desarrollo de un minisubmarino de tipo táctico denominado “Abisal”; así mismo el cuarto y último buque de tecnología española BVL, será construido en el país. Por todo esto, la industria naval venezolana, también se ha convertido en un nuevo proveedor para la Armada venezolana. También se está adquiriendo conocimiento para la fabricación de embarcaciones clase Caribe o mejor conocidos como POVZEE.
Aviación Militar
Venezuela cuenta en los actuales
momentos con una de las fuerzas aéreas más modernas y capaces respecto a
Latinoamérica. Esta organizada como los demás componentes en base a grandes
cantidades pero carece de grandes cantidades de equipo combate, a saber:
Comando de Operaciones Aéreas (integrados a este hay doce Grupos Aéreos,
especie de regimientos constituidos por los aviones de transporte, cazas y
helicópteros de la Aviación Militar), Comando de la Defensa Aérea, Comando de
Infantería Aérea, Comando Logístico, y el Comando de Personal. Su objetivo
principal es el de resguardar el espacio aéreo de Venezuela, aunque carece de
los escuadrones de caza de combate, ya que adquirió un caza pesado (Su-30) y
caza ligero de entrenamiento (K-8 Karakorum) y de las tácticas de las peleas de
perro de los cazas, está teoricamente en coordinación con los restantes
componentes de la Fuerza Armada Nacional, y participa activamente en el
desarrollo integral de la nación.
La historia de la Aviación Militar
venezolana se desarrolla a los largo del siglo XX. El 10 de diciembre de 1920,
un grupo de quince personalidades presidido por el Coronel David López Enríquez
y con la participación de asesores de la firma francesa Farman, encabezan el
acto de declarar instalada la Escuela de Aviación Militar de Venezuela. El
Ejecutivo Nacional de Gómez, contrata a la que parecía ser la más importante
potencia militar y aérea de la época de la primera post-guerra; la República de
Francia, recibiendo no sólo personal instructor y técnicos sino también
material aeronáutico. Aunque también se convoca los servicios de técnicos italianos
y pocos años después, a algunos instructores alemanes. El nuevo impulso que
recibe la Aviación militar es cuando se firma un convenio con el gobierno de
Italia, y llega la Misión Aeronáutica Italiana la cual permanece en el país
entre los años 1938 y 1940, cuando debe retirase motivado al inicio de la gran
guerra. Esta Misión italiana, constituida por el teniente coronel Ivo de
Bittembeschi, como instructor de bombardeo y el mayor Oscar Molinari, como
instructor de caza, quienes dan un significativo impulso a estas dos
especialidades dentro de la incipiente tecnificación de la Aviación Militar
venezolana. El 13 de enero de 1944, llega al país la primera Misión Aeronáutica
Estadounidense, con el objeto de realizar una evaluación del personal, equipos e
instalaciones, ya que el inventario aéreo había sufrido deterioro por falta de
partes y repuestos a consecuencia de la II Guerra Mundial. La influencia
militar y cultural estadounidense dentro de la Aviación Militar venezolana, se
mantiene casi hasta nuestros días.
El 22 de junio de 1946 es la fecha
estelar de la Fuerza Aérea Venezolana, porque la Junta Militar Revolucionaria
de Gobierno, instaurada a raíz de los acontecimientos políticos del 18 de
octubre de 1945, emite el Decreto con rango de Ley Nº 349, mediante el cual se
crean "Las Fuerzas Aéreas Venezolanas", y se le da igual rango y
categoría que a la que poseen el Ejército y la Armada dentro de las Fuerzas
Armadas Militares de la Nación. El día 10 de octubre de 1947, se promulga el
Resuelto Ministerial Nº 342 del Ejecutivo Nacional, firmado por el entonces
Ministro de la Defensa, teniente coronel Carlos Delgado Chalbaud, en el cual se
reorganizan las recién creadas "Fuerzas Aéreas Venezolanas",
documento éste que constituye el acta de nacimiento de la estructura aérea
actual, porque específica detalladamente, el primer plan de organización para
la naciente institución. En los años 50 en paralelo a la influencia
estadounidense, la Fuerza Aérea de entonces firma una serie de convenios de
cooperación técnica con el Reino Unido, y se adquieren los primeros aviones de
reacción de Latinoamérica (los Venom y Vampire).
Ya en los años 70, se producen toda una
serie de cambios y modernizaciones en el seno de la Fuerza Aérea venezolana. La
Comandancia General de la Aviación, ubicó su sede en la Base Aérea
“Generalísimo Francisco de Miranda”, el día 5 de diciembre de 1970, ubicación
que tiene en la actualidad. Y se comienzan ha adquirir una serie de sistemas
aéreos, que le han permitido a la Fuerza Aérea, hoy Aviación Militar
Bolivariana de Venezuela, garantizar la seguridad de la nación hasta nuestros
días. Se adquiere el primer caza de vuelo supersónico (el F-5) de toda
Latinoamérica, que se deja perder su operatividad por la retórica panfletaria
de Chávez al no medir las consecuencia de sus actos, estos sistemas deberán
recuperarse proximamente para elevar la capacidad de la FAV, se adquiere el
primer caza de vuelo supersónico sostenido (el Mirage V) de toda
Latinoamérica casi en paralelo a Brasil, que se termina regalando a
Ecuador, se adquiere el primer caza capaz de realizar maniobras cerradas a 9G y
mandos de gases de toda Latinoamérica (el F-16), que se deberá
poner en operatividad y modernizarlos, ya que es el única caza avanzado que
cuenta el país.
Manteniendo la tradición de primacía en
Latinoamérica, en el año 2006 se adquieren los cazas de fabricación rusa Su-30 MK2, los cuales
son los primeros cazas de altas prestaciones y superioridad aérea de toda
Latinoamérica, gracias a su doble deriva y doble turborreactores, su autonomía
de combate (aproximadamente 3.000 km sin tanques suplementarios de
combustibles) su moderno radar y gran capacidad de carga hace de estos cazas
los más poderosos de Latinoamérica, pero resultan pesados y pocos agiles
frentes a cazas como el F-15 Eagle o F-22 Raptor, de ahí la conveniencia de
recuperar al F-16 Falcon y al F-5 Nortrop, y comprar otro sistema de caza
avanzado.
Así mismo en el año 2010 se puso en servicio unas de sus últimas adquisiciones como resultado de un contrato con la potencia emergente de la República Popular China, las aeronaves de entrenamiento aéreo de última generación K-8 Karakorum para los pilotos del componente aéreo de la Fuerza Armada Venezolana. Muy pocos aviones y muy lentos para su cometido de proteger el espacio aéreo de la arremetida de los Kfir colombianos o F-18 Hornet americanos.
Así mismo en el año 2010 se puso en servicio unas de sus últimas adquisiciones como resultado de un contrato con la potencia emergente de la República Popular China, las aeronaves de entrenamiento aéreo de última generación K-8 Karakorum para los pilotos del componente aéreo de la Fuerza Armada Venezolana. Muy pocos aviones y muy lentos para su cometido de proteger el espacio aéreo de la arremetida de los Kfir colombianos o F-18 Hornet americanos.
Por su trayectoria en defensa de la
nación y su participación activa en el desarrollo del país, la Aviación Militar
venezolana ha sido galardonada con la mención más alta que puede otorgar la
nación: la calificación de Bolivariana. A partir del año 2007, el nuevo nombre
de la Aviación Militar, es: Aviación Militar Bolivariana de Venezuela. Su
Comandante General es el Mayor General José Gregorio Pérez Escalona.
En el año 2006, el presidente Chávez en desarrollo del Proyecto "Pemón", firma con Rusia la adquisición de 24 aviones Sukhoi Su-30 para repotenciar la Fuerza Aérea Venezolana, justificando dicha compra debido a la decisión de Estados Unidos de no vender repuestos ni municiones o misiles para los F-16 de Venezuela (aviones de combate principales de la Fuerza Aérea) y "prohibir" (veto militar) a otros países la venta de materiales, piezas y suministros militares a la nación venezolana. Los aviones demostradores 501 y 502 realizaron su primera presentación durante el 5 de julio de 2006. Estos aviones son de la versión Sukhoi Su-30 MK2, derivado del Sukhoi Su-30 MK para la China con modos adicionales A-G. La denominación actual para los Sukhoi Su-30 es MK2.
En el año 2006, el presidente Chávez en desarrollo del Proyecto "Pemón", firma con Rusia la adquisición de 24 aviones Sukhoi Su-30 para repotenciar la Fuerza Aérea Venezolana, justificando dicha compra debido a la decisión de Estados Unidos de no vender repuestos ni municiones o misiles para los F-16 de Venezuela (aviones de combate principales de la Fuerza Aérea) y "prohibir" (veto militar) a otros países la venta de materiales, piezas y suministros militares a la nación venezolana. Los aviones demostradores 501 y 502 realizaron su primera presentación durante el 5 de julio de 2006. Estos aviones son de la versión Sukhoi Su-30 MK2, derivado del Sukhoi Su-30 MK para la China con modos adicionales A-G. La denominación actual para los Sukhoi Su-30 es MK2.
Se materializó la compra a la República Popular de China de los aviones entrenadores medios K-8 Karakorum para cubrir la fallida adquisición de los Súpertucanos a Brasil a causa del veto impuesto por Estados Unidos (el veto de EE.UU se debió al continuo ataque verbal de Chávez hacia ese país, por lo que se decidió no envíar material bélico a Venezuela), ya que el Súpertucano posee componentes fabricados en los Estados Unidos. Se adquirieron 18 aviones, recibidos durante el año 2010, para el 20 de marzo de 2010 ya se habían recibido las 6 primeras unidades del mismo en la versión K-8W, las restantes aeronaves arribaron para mediados de agosto del 2010.
Adquisiciones recientes (2010-2013)
En enero del 2010 fueron incorporados 7
Challenger LSS Special (de fabricación canadiense) al Escuadrón de Vuelo
Ultraliviano de la Escuela de Aviación Militar. En noviembre de 2010, se hizo
el anuncio oficial de la compra de ocho (08) aeronaves Shaanxi Y-8 de
transporte táctico, para completar las operaciones de los aviones Lockheed
C-130 Hercules de la Aviación Militar Bolivariana, que se tendrán que
recuperar. Los aviones fueron designados como Y-8F-200W, subvariante del Y-8F.
Las dos primeras aeronaves Y-8F arribaron a Venezuela el 14 de noviembre de
2012, siendo asignados al Grupo Aéreo de Transporte No.6 de la Base Aérea El
Libertador de Palo Negro, Estado Aragua. El resto de los aviones serán
entregados en el transcurso del año 2013.
Nuevas adquisiciones han sido anunciadas para el año 2013, concretamente: dieciséis (16) helicópteros Enstrom 480 para la instrucción de pilotos de ala rotatoria, treinta y seis (36) aeronaves de instrucción primaria DiamondAircraft DA-40 DiamondStar, diez (10) aeronaves de transporte ligero Dornier Do-228NG, así como 9 Hongdu K-8VV Karakorumadicionales a los existentes. La Aviación Nacional de Venezuela se encuentra realizando actualmente un estudio propuesto por Dassault a para la adquisición de 24 aviones de combate Rafale, que sustituyan a la flota de F-16A/B con lo cual han realizado acercamientos con la firma francesa Dassault para una futura compra de cazas Rafale, el caza frances hasta la fecha ha sido el que mas a gustado al componente aviación siendo el paquete propuesto por Dassault mas atractivo a las necesidades de la AMV que el ofrecido por la firma rusa Sukhoi con el caza Su-35, aunque por su capacidad de adquisitiva y operatividad debería escogerse el SU-35.
Nuevas adquisiciones han sido anunciadas para el año 2013, concretamente: dieciséis (16) helicópteros Enstrom 480 para la instrucción de pilotos de ala rotatoria, treinta y seis (36) aeronaves de instrucción primaria DiamondAircraft DA-40 DiamondStar, diez (10) aeronaves de transporte ligero Dornier Do-228NG, así como 9 Hongdu K-8VV Karakorumadicionales a los existentes. La Aviación Nacional de Venezuela se encuentra realizando actualmente un estudio propuesto por Dassault a para la adquisición de 24 aviones de combate Rafale, que sustituyan a la flota de F-16A/B con lo cual han realizado acercamientos con la firma francesa Dassault para una futura compra de cazas Rafale, el caza frances hasta la fecha ha sido el que mas a gustado al componente aviación siendo el paquete propuesto por Dassault mas atractivo a las necesidades de la AMV que el ofrecido por la firma rusa Sukhoi con el caza Su-35, aunque por su capacidad de adquisitiva y operatividad debería escogerse el SU-35.
El Rafale es un muy buen avión pero su precio y la intentona del Magnicidio con el avión presidencial convierte esta propuesta en un suicidio. Además del costo extravagante del Rafale (84.000.000 U$) comparado con el avión SU-35 (40.000.000 U$) de mayor calidad y prestaciones superiores y de muy bajo costo de mantenimiento, con la ventaja de tener los SU-30MK2 y posibles crecimiento de esta línea con SU-34, MIG-35 y MIG-29M2 que usan los mismos repuestos, misiles y otras piezas en común, dejaría la compra del Rafale como un acto de presunta corrupción.
Guardia Nacional
Sus inicios se remontan a la misma
Independencia de Venezuela, cuando el Generalísimo Francisco de Miranda, la
crea como un cuerpo para la custodia y orden de las cámaras legislativas del
naciente congreso republicano, siendo abolida al caer la primera república; de
allí fue resurgiendo modestamente a lo largo de la historia, hasta que es
finalmente fundada el 4 de agosto de 1937 por el entonces Presidente de la
República, General en Jefe (Ej) Eleazar López Contreras. Uno de sus principales
exponentes fue el Teniente Coronel (GN) Oscar Tamayo Suárez, mejor conocido en
la historia de este cuerpo como "El Comandante", puesto que este
logró que la Institución dejase de ser un cuerpo especial del Ejército para ser
una Fuerza Armada más, así mismo le aseguró un prestigio sin igual a esta
Institución castrense, alcanzando su reconocimiento ante el resto de las
Fuerzas militares de Venezuela, a partir de la década de los años 1950, desde
cuando comenzó a denominarse como Fuerzas Armadas de Cooperación (FF.AA.C),
aunque siempre ha sido mejor conocida como la Guardia Nacional.
Actualmente es uno de los cuatro componentes que conforman la Fuerza Armada Nacional de Venezuela; que a la luz de los recientes acontecimientos que han originado las reformas en la Ley Orgánica de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana de Venezuela, paso a denominarse de manera legal como Guardia Nacional Bolivariana. Su lema "El Honor es su Divisa", y sus emblemas, de entre los cuales destaca el Ave Fénix, como símbolo de la inmortalidad de esta Institución, son las principales motivaciones que alientan a los hombres y recientemente a las mujeres que la conforman. La premisa de este cuerpo militar se encuentra definida en el Artículo 329 de la Constitución Nacional:
"El Ejército, la Armada y la
Aviación tienen como responsabilidad esencial la planificación, ejecución y
control de las operaciones militares requeridas para asegurar la defensa de la
Nación. La Guardia Nacional cooperará en el desarrollo de dichas operaciones y
tendrá como responsabilidad básica la conducción de las operaciones exigidas
para el mantenimiento del orden interno del país. La Fuerza Armada Nacional
podrá ejercer las actividades de policía administrativa y de investigación
penal que le atribuya la ley."
Por ende, este componente cumple con la
función de brindar seguridad y defender la soberanía del territorio nacional
venezolano, tanto internamente como a lo largo de sus fronteras, trabajando
conjuntamente con el Ejército, la Armada y la Aviación. Al mismo tiempo,
participa en operativos de seguridad interna en colaboración con los cuerpos
policiales estatales y municipales bajo la dirección del Ministerio del Poder
Popular para la Defensa y el Ministerio del Poder Popular del Interior y
Justicia respectivamente. En consecuencia, en caso de disturbios o saqueos,
actúa para disuadir y controlar las protestas y otros desórdenes públicos. Sus
funciones se encuentran diseminadas en las especialidades que definen su
accionar diario, aunque su entrenamiento es precario de todas las Fuerzas es la
mejor entrenada, al ser profesional.
Milicia Nacional
El Comando General de la Milicia
Nacional, está conformado por dos estratos: la Reserva Nacional, constituida
por todos los ciudadanos venezolanos que no estén en el servicio militar activo
(cuadros temporales de los otros componentes), o que hayan cumplido con el
servicio militar o que voluntariamente se incorporen a las unidades de la
reserva; y la Guardia Territorial, constituida por todos los ciudadanos
venezolanos que voluntariamente se organicen para cumplir funciones de
resistencia local ante cualquier agresión externa. De momento el Comando
General de la Milicia Nacional, está organizado en base a nueve (09)
Agrupamientos de Reserva, con presencia en todo el territorio nacional, y una
docena de Cuerpos Especiales de Resistencia (nucleados en torno a contingentes
de trabajadores de empresas e instituciones nacionales).
Se estima que pueden llegar en los actuales momentos a unos 667.000 hombres y 120.000 mujeres aproximadamente, en diversos status o niveles de adiestramiento, pero la meta fijada públicamente por sus autoridades es la de alcanzar a futuro el número de 1.100.000 combatientes reservistas, aunque carecen de entrenamientos y las tácticas para enfrentar una invasión de Colombia o USA.
Se estima que pueden llegar en los actuales momentos a unos 667.000 hombres y 120.000 mujeres aproximadamente, en diversos status o niveles de adiestramiento, pero la meta fijada públicamente por sus autoridades es la de alcanzar a futuro el número de 1.100.000 combatientes reservistas, aunque carecen de entrenamientos y las tácticas para enfrentar una invasión de Colombia o USA.
Es la figura más antigua de Defensa de
la nación que se conoce, cuyo primer origen lo podemos encontrar en los grupos
de resistencia indígenas (básicamente de la civilización Caribe y sus
descendientes, que se ganaron la fama de ser valientes, astutos y temerarios) que
a los largo de los siglo XVI, XVII y XVIII, lucharon contra la dominación
colonial española. De todas formas, el 13 de julio de 1797, dos milicianos,
Manuel Gual y José María España, se rebelan contra España. La conspiración de
Gual y España contó con la participación de todas las clases de la sociedad
colonial; fue el primer movimiento que contó con raíces populares. Luego en la
primera mitad del siglo XIX, agrupaciones de campesinos se unieron a la causa
libertadora, constituyéndose en elementos auxiliares en los ejércitos
libertadores formados por soldados y oficiales medianamente o grandemente
formados académicamente. Ya en la segunda mitad del siglo XIX, aparecen las
Milicias, por lo general grupos de montoneros que reunían los caudillos locales
en las provincias, entrono así para su protección, estas fueron reglamentadas
mediante Leyes de Milicias. Pasaron 100 años aproximadamente, para volver a
recurrir a la figura de la Reserva, como fuerzas autónomas y auxiliares de los
restantes componentes. El Comandante General de la Milicia Nacional es el Mayor
General Gustavo González López.
Milicia Territorial
Otras informaciones, en tanto indican
que oficialmente había 125.000 milicianos (Milicia Territorial) registrados a
inicios del 2012, que conformarían más de 70 batallones.En tanto que en otras
fuentes los batallones territoriales no suben de 50, que es la más acertada.
Los miembros de la Milicia Territorial tienen por rutina concentrarse dos veces
al mes (fines de semana) para recibir instrucción militar o realizar otras
actividades, por ejemplo de promoción social, decididas por el comando,
pudiendo además ser convocados a concentración en caso de necesidad frente a
otras ocasiones extraordinarias o emergencias. Un grupo especial dentro de la
Milicia Territorial lo constituye la llamada Milicia Rural, con su armamento y
equipo diferenciado al resto de la fuerza. Cada Milicia Territorial cuenta con
un Estado Mayor Especial formado por dirigentes civiles locales (alcaldes,
gobernadores representantes de organizaciones ciudadanas, ect) y oficiales
militares.
Estructura
La Milicia Bolivariana tiene su propio
Comando General con su respectivo Estado Mayor. La Milicia depende en lo
operativo del Comando Estratégico Operacional, que es su puente con la
comandancia en jefe de la FANB. En lo administrativos depende del Ministerio
del Poder Popular para la Defensa. Pero en la realidad es la Guardia
Pretoriana del Régimen, y se dedica a misiones de vigilancia contra los
antisociales y su entrenamiento es muy precario, ya que no están entrenados
para una confrontación convencional.
El Comando General de la Milicia Bolivariana, está conformado por dos estratos: la Reserva Nacional, constituida por todos los ciudadanos venezolanos que no estén en el servicio militar activo (cuadros temporales de los otros componentes), o que hayan cumplido con el servicio militar o que voluntariamente se incorporen a las unidades de la reserva; y las milicias propiamente tales, que son integradas por la Milicia Territorial (unidades geográficas) y los Cuerpos Combatientes (unidades conformadas por trabajadores de determinada institución). Los milicianos encuadrados en estas unidades cumplen períodos de instrucción, pueden ser convocadas frente a Estados de Excepción constitucional o eventualmente ser hábiles para ser llamados a llenar un cargo de naturaleza militar en calidad de empleo temporal. Además de dividirse en Milicia Territorial y Cuerpos combatientes, las unidades de milicia se clasifican según sus objetivos en tres tipos:
El Comando General de la Milicia Bolivariana, está conformado por dos estratos: la Reserva Nacional, constituida por todos los ciudadanos venezolanos que no estén en el servicio militar activo (cuadros temporales de los otros componentes), o que hayan cumplido con el servicio militar o que voluntariamente se incorporen a las unidades de la reserva; y las milicias propiamente tales, que son integradas por la Milicia Territorial (unidades geográficas) y los Cuerpos Combatientes (unidades conformadas por trabajadores de determinada institución). Los milicianos encuadrados en estas unidades cumplen períodos de instrucción, pueden ser convocadas frente a Estados de Excepción constitucional o eventualmente ser hábiles para ser llamados a llenar un cargo de naturaleza militar en calidad de empleo temporal. Además de dividirse en Milicia Territorial y Cuerpos combatientes, las unidades de milicia se clasifican según sus objetivos en tres tipos:
De
empleo general: Unidades móviles destinadas a actuar en territorio de un Estado
o en un conjunto de municipios.
De
empleo territorial: Destinadas a defender una ciudad u objetivos de importancia
dentro de un territorio determinado.
De
empleo local: Destinadas a la defensa de potenciales objetivos económicos
y políticos de una determinada localidad, o a colaborar al
mantenimiento del orden público.
El Comando General de la Milicia
Nacional está organizado en base a nueve (9) Agrupamientos de Reserva, con
presencia en todo el territorio nacional. Una estimación señala que puede
llegar a unos 667.000 hombres y 120.000 mujeres aproximadamente, en diversos
status o niveles de adiestramiento, pero la meta fijada públicamente por sus
autoridades es la de alcanzar a futuro (2015) el número de 1.100.000
combatientes reservistas. Pero estos números reflejarían niveles de
entrenamiento muy diverso.
Cuerpos combatientes
Un segundo tipo de unidades es
conformado por los llamados Cuerpos Combatientes, que son formados por
trabajadores de determinadas instituciones y empresas públicas o privadas, que
se organizan no por área de residencia del miliciano sino en virtud de su
pertenencia a un determinando ente. Este ente, por ejemplo una empresa, es la
responsable administrativa del funcionamiento de su respectivo Cuerpo
Combatiente, que depende operativamente del Comando General de la Milicia
Bolivariana.
Existen antecedentes, en los materiales de promoción de estos Cuerpos Combatientes, que en ellos el nivel de concentración o entrenamiento sería más ligero que en la Milicia Territorial, con una jornada al mes (un sábado) en vez de los dos que son los habituales en la Territorial, lo ideal es un entrenamiento continuo de un año, esto imposibilita el desarrollo de la disciplina, entrenamiento en combate urbano o rural, uso de armas de combate, capacidad de formación de los Sargentos, instrucción de los pelotones, ejercicios físicos, instrucción en orden abierto o cerrado, etc. Así mismo, en los textos relativos a Cuerpos Combatientes prima mensajes alusivos a la flexiblidad del entrenamiento y su adaptación a la condición física del miliciano, por ejemplo aclarando la posibilidad de que los jubilados de las instituciones involucradas también se integren a las unidades, pero no los entrenan en condiciones reales de combate, limitándose al uso de las armas reglamentarias, careciendo las unidades de eficiencia combativa. Aún así, se señala, que los miembros reciben instrucción en infantería, muy elemental, en: comunicaciones, primeros auxilios, en coordinación con organismos de seguridad. Además previa evaluación médica podrían acceder a cursos que habitualmente se consideran de especialización (paracaidismo, comandos, helitáctico y buceo).
Equipo y armamento:
La Milicia Territorial utiliza el mismo uniforme común que es de reglamento en toda la FANB (el uniforme designado "Patriota"). Su arma de reglamento es el fusil automático de asalto FN FAL belga, que viene de ser reemplazado en el Ejército Nacional por el AK-103 de fabricación rusa y local, que es la nueva arma estadarizada de las fuerzas regulares, sustituyendo al fusil FAL de mayor capacidad de fuego. La Milicia Rural o Milicia Campesina porta el fusil de cerrojo ruso Mosin-Nagant M91/30, un diseño de fines del siglo XIX, que siguió siendo el equipamiento de unidades de la segunda línea soviética hasta la década de 1960, que debería ser reemplazado por FN FAL o AK 74. Estos cuerpos rurales también se caracterizan por portar machete y utilizar, al menos en desfiles, sombreros de fibra vegetal típicos del país ("de cogollo"), así como una versión caqui del uniforme "Patriota".
Han existido anteriormente versiones de que la milicia sería dotada eventualmente con batallones de tanques, y han circulado igualmente imágenes de milicianos entrenados con equipamiento de mayor poder de fuego respecto a sus habituales fusiles FAL, como ametralladoras pesadas, antitanques Carl-Gustav, pequeños cañones sin retroceso o blindados ligeros Dragoon 300 AFV, pero todas estas actividades de instrucción se realizaría en recintos del ejército y esas armas no pertenecerían a la milicia, ya que no posee el Ejército material excedentario. Hay un componente aéreo de la Milicia Bolivariana que estaría en proceso de activación desde hace algunos años. Sus oficiales pilotos, según han indicado fuentes oficiales, estarían encargados eventualmente de operar helicópteros, Mi-172 del Servicio de Búsqueda y Salvamento delInstituto Nacional de Aeronáutica Civil.
Globalmente el poderío bélico de
Venezuela, se ubica en el puesto número 38 entre todos los países con fuerzas
armadas (según estudios del año 2009-2010), pero por el gasto en sus Fuerzas
Armadas debería ubicarse en el puesto 14, aunque la falta de transparencia en
la adquisición de material, la poca idoneidad de los equipos que
adquieren, la carencia de entrenamiento de la oficialidad, sargento y tropa, y
la falta de formación del staff de Estado Mayor las colocan en ese sitio, muy
por debajo de Colombia o Brasil, sus enemigos inmediatos. Venezuela carece de una unidad de lucha antiterrorista más o menos seria.
http://es.wikipedia.org/wiki/Fuerzas_Armadas_de_Venezuela. "Fuerzas
Armadas de Venezuela".
http://es.wikipedia.org/wiki/Ej%C3%A9rcito_Nacional_de_Venezuela. Ejército Nacional de Venezuela".
http://es.wikipedia.org/wiki/Armada_Nacional_de_Venezuela. Armada Nacional de Venezuela".
http://es.wikipedia.org/wiki/Aviaci%C3%B3n_Nacional_de_Venezuela. "Aviación Nacional de Venezuela".
http://es.wikipedia.org/wiki/Milicia_Nacional_de_Venezuela. "Milicia Nacional de Venezuela".
http://es.wikipedia.org/wiki/Ej%C3%A9rcito_Nacional_de_Venezuela. Ejército Nacional de Venezuela".
http://es.wikipedia.org/wiki/Armada_Nacional_de_Venezuela. Armada Nacional de Venezuela".
http://es.wikipedia.org/wiki/Aviaci%C3%B3n_Nacional_de_Venezuela. "Aviación Nacional de Venezuela".
http://es.wikipedia.org/wiki/Milicia_Nacional_de_Venezuela. "Milicia Nacional de Venezuela".
EL MANUAL DEL PERFECTO ESCUALIDO.
Por Kelder Toti.
A nuestra amiga Marianela Salazar le
pasa, lo que a la mayoría del país, se queja de lo caótico y abusivo del
régimen, pero no hace nada para remediar el mal. Puedes proteger tú correo
electrónico de la intervención de la Dirección de Inteligencia Electrónica, se
pueden tomar las más diversas medidas, todas ellas muy sencillas: cuando te
comuniques utiliza un ciber y cambia todos los días de fuente, ya que las
líneas de fibra óptica son muy fáciles de intervenir, con la tecnología
israelí, norteamericana y rusa que han comprado, se puede dar el caso de un
amigo mío, que iba leer las noticias, y le intervinieron las máquinas, con tan
buena suerte que tuvieron que aguantarse el “cebo” por chat de la operadora,
hasta que uno de ellos, se empató con ella.
Utiliza datos ficticios sacados del
portal del Seguro Social o del CNE en la inscripción, y en la dirección no
utilices ningún nombre o seña que te identifique, en todo caso al registrarte
no uses los verdaderos nombres, ya que puede ser que el servidor facilite la
información, usa contraseñas de quince a veinte dígitos, entre letras, vocales,
números y signo de puntuación. Evita entregar tú dirección a todo el
mundo, esta regla, impedirá que un ordenador utilice un programa de
probabilidad estadística, y los abra, ponte un seudónimo y cambia
frecuentemente de correo, usando una contraseña en la bandeja de entrada.
Elimina los textos que no tengan la contraseña, sin abrir los mensajes
publicidad y propaganda antichavista que puede ser un virus que se instale en
la computadora o un programa espía, tú correo para cuestiones especiales no se
lo entregue a cualquiera, ya que lo pueden rastrear, no firmes tus mensajes, es
preferible la sombra del anonimato, y ten cuidado quien mira por encima de tu
hombro, las amistades engañan.
Los foros que te introduzca de
política, la mayoría de ellos han sido intervenido por la DISIP , para ubicar y
saber los que piensan los disidentes, si quieres participar, hazlo con datos
falso de tú identidad, a veces ellos se confunden y dan sus identidades y
direcciones reales, facilitando a la DISIP su ubicación, y a los soplones de
los Círculos Bolivarianos los mandan a vigilarte, y les facilita tu
localización, por cada diez venezolanos uno es un informante del gobierno, un
ejemplo de ello fue el de una amiga que participa en estos foros, al saber las
noticias que propalaba (el plan de operaciones de los chavistas en las
elecciones) la buscaron, la emboscaron cuatro sujetos y la quemaron con
colillas de cigarrillo, ya que muchos de ellos son fachadas para sacar ideas e
información de personas ingenuas, que en realidad colaboran con una
administración corrupta y asesina. Elimina los mensajes que hallas leído, y no
graves las direcciones de tú contacto en el menú de tu correo, apréndetelos de
memoria, eso evitará que si llegan abrirlo, no delates a tus amigos.
Ten cuidado lo que comentes en los
taxis y las moto taxis, que pululan en las ciudades, muchos de ellos son
informante de las Círculos Bolivarianos, muéstrate cordial y no muestre tu desprecio
hacia la actual situación, es preferible que no converses con ellos, pueden
ocultarse como antichavistas, pero en realidad es una celada para sondear tus
intenciones; evita ir a pedir el pasaporte, (si eres perseguido o hiciste un
negocio que te estafaron) en la ONIDEX , ya que serás detenido en la cola para
entregártelo, es preferible que contrates un abogado que vaya por él, y busque
un gestor, y vallas a varias direcciones ese día evitando ser seguido el
abogado, y lo deje con un amigo lejano, jamás un familiar, ya que vigilarán a
la familia, de lo contrario te detendrán y te inyectarán en los sótanos
de la DIEX : Epiniflina, un acelerador cardiaco, provocándole un ataque
al corazón, matándote, y sacándote en la madrugada, tirándote el cualquier
esquina, esta técnica fue enseñada por el MOSSAD, por ella mueren de una
a dos personas semanalmente. Nos pueden derrotar en Diciembre con sus
trampas, pero jamás nos vencerán. La victoria es fruto de la constancia y
honestidad de cada uno de nosotros.
Pero que puede hacer un periodista si está
bajo constante amenaza, es perseguido e intimidado: en primer lugar no firmes
sus trabajos en los periódicos, portales digitales y revistas, colocando un
nombre falso con una falsa fotografía, cambiando el estilo de tú
redacción y dando un país falso de origen; elimina tú nombre y
apellido de pila en los correos electrónicos, dando un mote falso que cambias
constantemente, evita llamar por teléfono y celular, ya que puede ser
intervenido, si se ve amenazado contrata a guardaespaldas cada tres días,
evitando que los sobornen para vigilarte o los detenga y torturen, y los mantén
a golpe en el Helicoide, como fue el caso de Patricia Poleo. Pero la mayor
medida de seguridad, es balancear la información y colocarse en la
posición del otro, evitando el palangrismo que socava la integridad del
profesional de los comunicadores sociales, que le quita valor moral a sus
trabajos, y jamás le permitirán hacer lo correcto, no puedes herir los
sentimientos de las personas de las que informa, de lo contrario los Mario
Silva serán la espada de Damocles de los periodistas, justificando sus burlas y
agresiones. Quizás ustedes me preguntaran porque no me lo aplico en mí, a
esto les responderé: esto no es periodismo, es una crónica diaria de un país
maldito.
Estos buscarán cualquier excusa para
allanar tú casa, robar tus propiedades, retener tu dinero si está en bancos
públicos o bancos privados, controlados por ellos. Colócalo en bancos
internacionales, y tus valores personales en caja de seguridad en banco
extranjero, buscarán pruebas incriminatorias, sin orden de cateo, siguiéndote y
presionándote: con amenazas de muerte, órdenes judiciales, destituyéndote de tu
empleo si eres funcionario público, buscando a tus amigos y vecinos para
que te vigilen o informen sobre ti, prometiéndoles préstamos o cargos públicos.
Evítalos como el perro a la sarna, múdate constantemente, sé independiente en
tu trabajo, ten cuidado lo que dices, y si lo dices prevé las consecuencias,
puedes comentar acciones que vas a participar, que se han falsa, para
identificar a los agentes que merodeen, descúbrelos y enfréntalos hasta
someterlos verbalmente o físicamente descubrirás que correrán como ratoncitos,
ya que carecen del entrenamiento para enfrentar situaciones de ese tipo,
destruyendo su red de informante, intimidándolos con amenazas, eso los obligara
a correr o encaramarse, es un trabajo muy pausado pero apasionante.
Los Círculos Bolivarianos están
formados por individuos como: Rocky Davies: violador cuando era profesor,
narcotraficante y timador ocasional. Este se organiza con tres individuos más,
chequean a las personas en su habitación y oficina donde trabajen, sin orden de
cateo, y siguen a las personas e informar sobre las mismas; intrigan con la
DISIP sobre los sujetos de su persecución. Aquí se puede ver, que desde abajo
se manipula la información, para alcanzar objetivos personales: un préstamo a
una cooperativa, cargos públicos o tener contacto con los de arriba. Hay
que huir de este tipo de gente, si se arremete físicamente contra de
ellos, les dará una excusa para encarcelarte. Lo mejor es cambiar de sitio de
trabajo y seleccionar cuidadosamente tus amistades.
Si quieres hacer filme con cámaras o
celular de denuncia, para grabar su infamia, no intentes grabarlos
abiertamente, simula que hablas o marcas las teclas, si eres un antichachavista
reconocido ni siquiera lo intentes, ya que te la quitarán de las manos, hazle
un hueco a la cartera, bolsa o bolsillo del pantalón, y grabas colocando la
cámara, escondiéndola de las miradas indiscretas, entrenándote en ello. Si
tienes posibilidad de filmar a escondidas, colócales en los laterales del lente
un cartón como gringolas de caballo, para que no te ubiquen por el ángulo, y
por el sitio de referencia, ubicando tu posición, descubriendo tu persona. Y lo
más importante está pendiente de las personas a tu alrededor, y no dudes en
correr. Y buena pesca.
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